La tecnologÃa ha jugado un papel importante durante la pandemia del COVID-19, permitiendo a empresas, instituciones de Gobierno, centros sanitarios y educativos; mantenerse comunicados y activos, a través del trabajo remoto, el estudio online y las transacciones comerciales.
Este tiempo también ha sido propicio para que se desarrollen soluciones tecnológicas a partir del código abierto u open source, que sirvan de apoyo para combatir los estragos mundiales que ha ocasionado la enfermedad.
Herramienta clave
El informe de Red Hat del año 2019, manifiesta que el código abierto es actor principal en la modernización de la infraestructura de las TI para actualizar sistemas operativos propietarios, servidores de aplicaciones y software de virtualización.
Martha Ardila, Gerente de Ventas para Centroamérica y el Caribe de Red Hat indicó que “…más allá de la modernización de infraestructura de la tecnologÃa de la información, el código abierto permite diversidad de posibilidades para la transformación digital, las herramientas de gestión en la nube, las bases de datos, entre otrosâ€.
Según este informe, el 44% de las empresas en Estados Unidos usan el código abierto para el desarrollo de aplicaciones y en América Latina, lo hacen aproximadamente un 49%.
En este estudio realizado a 950 lÃderes de TI, se concluyó que la usabilidad de las bases de datos desarrolladas, alcanzan entre 39 % y 43%.
Esto nos demuestra la diversidad del código para hacer desarrollo en esta coyuntura mundial y que ha sido un gran aliado en la estrategia de los Gobiernos alrededor del mundo, para combatir el virus.
El Centro Mundial del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ha hecho una recopilación de herramientas, basadas en código abierto, y que están siendo utilizadas como respuesta a la emergencia sanitaria.
Estas soluciones se dividen en 4 áreas: monitoreo del COVID-19, prevención y contención de la enfermedad, fase de diagnóstico y recuperación de los pacientes.
En China, también aprovecharon las ventajas del código abierto para desarrollar una aplicación que facilita el intercambio de información entre los proveedores de insumos hospitalarios y clientes potenciales, como centros médicos y organismos de atención sanitaria.
En Estados Unidos, la Universidad de Pensilvania y un equipo de expertos en salud, desarrollaron una herramienta a partir de código abierto, que estima el impacto del COVID-19 en las ciudades.
Y en América Latina, Argentina eligió a Red Hat OpenShift como base para implementar su Red Digital de Salud, bajo el concepto de atención sanitaria abierta; brindando información de los indicadores nacionales de salud y servicios de infraestructura, a través de su nube.Â
Otras aplicaciones de código abierto que están siendo utilizadas para la investigación y colaboración son:
GitHub: presta sus servicios para almacenar y compartir los detalles del procesamiento bioinformático sobre el esquema de 172 genomas.
Iniciativa GISAID: promueve el intercambio internacional de todas las secuencias de virus de la gripe, los datos clÃnicos y geográficos, para ayudar a los investigadores a comprender cómo evolucionan, se propagan y pueden llegar a convertirse en pandemias.
Rampart: usado para asignar y mapear lecturas en tiempo real sobre el virus SARS-CoV-2.
CommCare: esta plataforma móvil está siendo usada en más de 60 paÃses para hacer seguimiento de los clientes, servicios, cadena de suministro de productos básicos y mensajes a los pacientes.
Community Health Toolkit (CHT): provee un kit de herramientas de salud comunitaria, que incluye envÃo de mensajes de texto SMS, análisis de datos, apoyo a eventos, difusión de mensajes educativos, y más
El aporte del  Código Abierto contra la pandemia ha sido notable y de gran utilidad a nivel mundial, tanto para la lucha contra esta terrible enfermedad como para la contribución de nuevas e innovadoras aplicaciones, que serán la base de nuevos desarrollos en el mundo de la tecnologÃa.Â
Redacción Lissett Flores para Soluciones Etech 2020.
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